27/3/2021

PERSPECTIVA DE P&G SOBRE RAZAS

En P&G hemos estado presentes para nuestras comunidades en los momentos difíciles. Es lo que somos; es lo que hacemos.

En un momento en el que regiones de Estados Unidos, y de hecho de nuestro mundo, están más divididas que nunca, la necesidad de que demos un paso adelante, tanto en palabras como en hechos, nunca ha sido más importante.

La desigualdad en nuestra sociedad es claramente visible. De hecho, se ha incorporado a nuestra cultura de muchas maneras que ni siquiera reconocemos. Nos basta con mirar cómo la pandemia del COVID-19, que nos perjudica a todos, se cobra vidas y afecta a las comunidades con distintos grados de impacto.

Por ejemplo, en Estados Unidos, los afroamericanos son los más afectados y tienen hasta 3 o 4 veces más probabilidades de morir a causa del virus, debido a las condiciones creadas en gran medida por la desigualdad en los sistemas económicos, medioambientales y sanitarios. Los hispanoamericanos, muchos de los cuales trabajan en industrias y funciones de servicios, han sufrido un impacto financiero desproporcionado. El drástico aumento de los discursos de odio y los actos de violencia dirigidos a los asiaticoamericanos durante la pandemia afecta a las comunidades de todo el país de forma indescriptible. Y también se han hecho más visibles las dificultades y la carga adicional que asumen las mujeres en todo el mundo.

Por eso, P&G y nuestras marcas están redoblando sus esfuerzos para promover la igualdad de todas las personas y, especialmente, en estos momentos, en que las comunidades que se enfrentan al racismo, a los prejuicios y la brutalidad.

Durante años, hemos usado nuestra voz como anunciante líder para visibilizar la desigualdad, poner de manifiesto los prejuicios y fomentar el diálogo que lleva a la comprensión y la acción. Hemos reunido a las empresas para una acción colectiva. Y hemos hecho de la igualdad una prioridad dentro de nuestras propias instalaciones. Se necesita hacer aun más, buenas acciones sostenidas y sistémicas.

Se trata de mucho más que de dinero. Nuestros líderes están levantando la voz y expresando lo que creemos. Nuestros empleados se involucran cada vez más en sus comunidades locales. Nuestras marcas desarrollan programas para hacer frente a la desigualdad y al odio sistémicos. Y estamos usando nuestra posición como empresa líder en ciudadanía para convocar a otros con el fin de lograr un mayor impacto colectivo. Además, contribuimos económicamente para financiar a las organizaciones que están en la primera línea.

La dificultad a la que se enfrenta cada una de nuestras comunidades es única. Por lo tanto, la forma en la que las apoyamos también es única. Nos guiamos por nuestros principios y valores, con un claro enfoque en ayudar y ser útiles, y en equilibrar nuestro enfoque en el corto y largo plazo. Una cosa es segura, hoy y todos los días estamos con quienes luchan por la igualdad y la justicia.